The Baron couldn't place the colonel bashar's face: thin with mouth like a

"Todavía no ha terminado". Zhao Wou -ki estaba furioso y decidió dar una lección al pequeño erizo frente a él. Bloqueó su mano derecha frente a su cara y le disparó la mano izquierda al pecho de Tang San. Por supuesto, su palma no usó mucho, pero tuvo mucha pérdida para sí mismo. Estaba realmente incómodo en su corazón. Por supuesto, cuando se disparó a esta palma, había recuperado su técnica de anillo de alma de diez mil años, de lo contrario, Tang Sanfei fue directamente exprimido hasta la muerte por esta habilidad.

El otro de mal humor pertenece a Zhao Wou -ki. Originalmente, pensó que era solo otro arma oculta de Tang San. ¿No es fácil bloquear un martillo que Tang San ondeó? Sin embargo, cuando el martillo golpeó su palma, se sintió mal.

El martillo golpeó la palma, y ​​la palma de su mano le golpeó la cara. Zhao Wuji de repente fluyó su nariz, además de la palma de su palma, y ​​de repente pareció abrir una casa de tinte, que se convirtió en una cara grande. Toda la persona fue rota un poco.

"You mistake me, my dear. I have a high respect for your nerves. They are my old friends. I have heard you mention them with consideration these last twenty years at least. "

Tang Hao se movió, y su movimiento parecía no ser diferente de antes. Con piernas con cintura. Con la parte posterior del cinturón, el brazo de la correa, un sonido local, el martillo se rompió en el bloque de hierro.

El martillo se recuperó en alto, y el movimiento de Tang Hao y la amplitud del golpe de martillo parecían alcanzar un ajuste perfecto. No temprano ni tarde. En el momento en que el martillo rebotó hasta el punto más alto, el cuerpo condujo el martillo a circular durante una semana. Specked hacia abajo de nuevo.

Los ojos de Tang San se iluminan. Esta es claramente una forma de usar el poder de usar los jefes del martillo y la colisión de metal para convertir la rebelión en su propia fuerza. La acción es perfecta y coordinada. En la mayor medida, se evitó el daño a su propio daño a sí mismo. En cambio, este poder se convirtió en un golpe continuo. Del segundo golpe, el poder de cada golpe superó la fuerza total de Tang Hao. Pero todavía está bajo el control de él.

Instante. Se han agotado treinta y seis martillos, las manos de Tang Hao condujeron el martillo de fundición para rotar en el aire durante tres semanas, y luego fue a la potencia del martillo y se puso de pie. La cara no es roja. No respiró, como si el golpe tormentoso no fuera su lugar.

Tang Hao dijo indiferentemente: "Quiero hacer mucho. Solo hay una forma. Coincidencia cocinada. Al mismo tiempo, debes recordar que si está golpeando un metal ordinario, entonces cuando es la mayor impureza. A eso. tiempo, en ese momento, cuando aprovechaste, la fuerza era menor. Cuando las impurezas de su terreno disminuyeron gradualmente. Su fuerza puede comenzar a aumentar y mantener gradualmente el efecto de los golpes. Puede practicar lentamente. No aumente a ciegas su Fuerza y ​​velocidad. La precisión es igualmente importante. Al menos necesitas saber que continuarás. ¿Dónde golpearás, de lo contrario, de lo contrario? ¿De qué sirve la fuerza? "

Ya que es un golpe completo. Es difícil controlarse. Con la ayuda del rebote, es difícil controlar el equilibrio del cuerpo para alcanzar la posición que desea lograr. Sin agregar un martillo, el control requerido es algunos puntos. La rotación constante del cuerpo no solo se sentirá mareada del cerebro. Al mismo tiempo, el poder de cada martillo es más difícil de controlar.

Afortunadamente, había martillado durante mucho tiempo. Tiene pocas impurezas y no es tan fácil de romper. De lo contrario, bajo su martillo de fundición no preparado. Me temo que se ha roto hace mucho tiempo.

ciertamente. Esto también tiene una relación inseparable con el método de la fuerza de la pantorrilla. Con este método de fuerza, salva enormemente el consumo de Xuan Tian Gong. Deje que Tang San tenga más tiempo para tirar de la caja y forjar.

Pasaron tres meses, y cuando Tang San podría continuar lanzando la tierra por trece. Tang Hao comenzó a enseñarle cómo forjar el aparato. El método de enseñanza de Tang Hao es muy directo. Solo hazlo primero. Entonces deja que Tang San lo haga de nuevo. Mientras lo vea un poco, lo dejó practicar sin hablar demasiado. Solo en lugares críticos. Solo se dirán una o dos palabras.

En este momento, los ojos de las personas que rodeaban la batalla eran un poco rectas, especialmente cuando Tang San continuó saliendo del arma oculta, estaban llenos de sorpresas. Ya sea Zhu Zhuqing y Ning Rongrong o Dai Mubai. No puedo evitar enfriar en secreto en sus corazones. Descubrieron que si fueron reemplazados por Zhao Wuji, tal vez ya habían sido reclutados.

El tercer anillo de alma en Zhao wou -ki, el anillo de alma de mil años púrpura de repente se amplió de repente, pero no inyectó la capacidad en su cuerpo, sino que rodó y vertió directamente al suelo.

Zhao Wuji miró a un lado el incienso en llamas, y el incienso se había quemado a la mitad de la posición. No pudo evitar sentirse ansioso.

Zhao Wuji se echó a reír: "Es hora de terminar, puede obligarme a usar Four Soul Ring, estás calificado para la admisión".

Esta habilidad puede ser inútil para el maestro del alma de otros métodos de cultivo, pero es fácil de usar para Zhao wou -ki que es poderoso. Con el posicionamiento del posicionamiento, cerró su distancia entre él y su oponente, y su fuerza y ​​ataque tienen el mayor espacio para el desarrollo. Para terminar la batalla lo antes posible, usó sus habilidades.

Tang San eligió lanzar un tiempo parasitario justo. Sucedió que Zhao Wou -ki estaba a punto de aterrizar antes de aterrizar. De esta manera, Zhao Wou -ki no pudo lanzar un ataque lo antes posible después de aterrizar.

De repente, la ballesta asustó el sudor frío de Zhao Wou -ki. Aunque su cuerpo sacudió la ballesta, el impacto de la ballesta se raspó la cara con dolor en la cara, y se podía ver cuán fuerte era el poder de la máquina de la ballesta.

him? He couldn't remember.

that held his tingling body in the chair. He was aware there had been a passage

"La! You are so strange! But I must tell you how it went off. We were married, you know, at St. Clement's, because Wickham's lodgings were in that parish. And it was settled that we should all be there by eleven o'clock. My uncle and aunt and I were to go together; and the others were to meet us at the church. Well, Monday morning came, and I was in such a fuss! I was so afraid, you know, that something would happen to put it off, and then I should have gone quite distracted. And there was my aunt, all the time I was dressing, preaching and talking away just as if she was reading a sermon. However, I did not hear above one word in ten, for I was thinking, you may suppose, of my dear Wickham. I longed to know whether he would be married in his blue coat. "

"Well, and so we breakfasted at ten as usual; I thought it would never be over; for, by the bye, you are to understand, that my uncle and aunt were horrid unpleasant all the time I was with them. If you'll believe me, I did not once put my foot out of doors, though I was there a fortnight. Not one party, or scheme, or anything. To be sure London was rather thin, but, however, the Little Theatre was open. Well, and so just as the carriage came to the door, my uncle was called away upon business to that horrid man Mr. Stone. And then, you know, when once they get together, there is no end of it. Well, I was so frightened I did not know what to do, for my uncle was to give me away; and if we were beyond the hour, we could not be married all day. But, luckily, he came back again in ten minutes' time, and then we all set out. However, I recollected afterwards that if he had been prevented going, the wedding need not be put off, for Mr. Darcy might have done as well. "

"Oh! certainly, " said Elizabeth, though burning with curiosity; "we will ask you no questions. "

But to live in ignorance on such a point was impossible; or at least it was impossible not to try for information. Mr. Darcy had been at her sister's wedding. It was exactly a scene, and exactly among people, where he had apparently least to do, and least temptation to go. Conjectures as to the meaning of it, rapid and wild, hurried into her brain; but she was satisfied with none. Those that best pleased her, as placing his conduct in the noblest light, seemed most improbable. She could not bear such suspense; and hastily seizing a sheet of paper, wrote a short letter to her aunt, to request an explanation of what Lydia had dropt, if it were compatible with the secrecy which had been intended.

Jane's delicate sense of honour would not allow her to speak to Elizabeth privately of what Lydia had let fall; Elizabeth was glad of it;--till it appeared whether her inquiries would receive any satisfaction, she had rather be without a confidante.

"You had an emergency plan," the Baron said. "Where have your woman and the